La resolución de problemas es el proceso de identificar un problema, llegar a posibles soluciones y elegir el procedimiento adecuado. La Comisión Europea ha identificado la resolución de problemas y la capacidad de trabajar en colaboración como un indicador principal de las competencias transversales que deben adquirirse como parte de las competencias básicas. Según el consorcio “SUPport of Problem-solving mentality in lifelOng leaRning for Trainers” SUPPORT, el aprendizaje de los adultos consiste en un proceso permanente de planteamiento y resolución de problemas, especialmente cuando se trata de personas poco cualificadas, en el que el entorno de aprendizaje no solo está desafiado por los conocimientos que hay que adquirir, sino que tiene que hacer frente a una serie de prejuicios existentes, exclusión social, estereotipos, barreras lingüísticas, limitaciones culturales, entre otros.
La retención como concepto es clave para explorar y mantener un entorno de aprendizaje que se esfuerce por superar los retos y fomentar las mentalidades de resolución de problemas. En los Escenarios de aprendizaje que puedes examinar a continuación, abordamos múltiples retos a los que se enfrentan tanto los educadores como los estudiantes para mantener el interés y potenciar su nivel de progreso.